Algunos hablan de que vamos a tener más de todo, más militares en España, en Rota, más recursos para defensa y armamento, más enemigos reales y facticios.

Un mundo más inseguro, más complicado, con más miedo... se ha levantado otro telón de acero, aparece otra guerra fría. Rusia es el enemigo militar y China el enemigo económico.

Cuando hay bloques también aparecen quienes mandan en los mismos. Europa pierde poder, pierde independencia y EE.UU. toma el control militar, que ya lo tenía, pero ahora de forma oficial. Europa sigue con sus complejos,  incapaz de tener un ejército propio y sin el mismo tampoco se puede tener una política exterior independiente, a veces tampoco la interior.

 Se han dado la imagen de una OTAN más unida, fortalecida y ampliada, pocas cosas unen más que un enemigo común y la invasión de Ucrania por parte de Rusia, ha logrado quizás lo contrario de lo que pretendía, el resurgir de una organización militar, que sin enemigos no tiene mucho sentido.

Turquía, el socio díscolo, pronto ha vuelto al redil, sobre todo cuando le han garantizado que a los Kurdos ni agua, ha levantado el veto a la adhesión de Suecia y Finlandia, lo que va a añadir más de mil kilómetros nuevos de tensión en frontera directa con Rusia, que pasa de "socio estratégico" a "enemigo directo"

Por otra parte, aunque Ucrania no es miembro de la Alianza, la OTAN se ha comprometido a seguir enviando armamento a Kiev para combatir a las tropas rusas. Aumenta de manera considerable su presencia militar en flanco norte de Europa, se habla de más de 300.000 militares, más de diez veces la presencia militar actual, lo que habla del temor y también de como está aumentando la tensión en el norte de Europa, con repercusiones para todos.

Como todo en la vida, el que pone el dinero es el que manda y EE.UU.  aumenta su  presupuesto de defensa y hace aumentarlo a todos sus socios a un mínimo de 2% del PIB, también aumenta su presencia militar en Europa y su control sobre la misma, que pasamos a estar mucho más tutelados. 

Ahora se definen dos campos de actuación totalmente separados, por una parte, aquellos que según los países de la OTAN no respetan los derechos humanos, ni son democracias, sino dictaduras como China, dictadura comunista y Rusia, dictadura de un personaje como Putin. 

Por otra parte, otros países como Australia, Japón, Corea del Sur y Nueva Zelanda han asistido a esta cumbre de lo OTAN en Madrid en calidad de invitados, lo que abre la posibilidad de seguir ampliando esta organización militar o uno limites hasta ahora no conocidos. 

En tiempos de guerra la seguridad es un bien muy preciado, y solo han que ver el cambio de posición de la población que en España está superando ya el 80% de apoyo a la una Organización Militar como OTAN, muy cuestionada históricamente en nuestro país. La petición de ingreso en a la misma de Suecia y Finlandia es algo muy significativo.

En lo referente a pretensiones de España y su preocupación, hasta obsesión por lo que puede pasar en la frontera del sur, sobre todo Ceuta y Melilla, aunque también Italia tiene la suya, por ello ha sido un aliado para lograr que en acuerdo definitivo aparezca, aunque a regañadientes de algunos que están más preocupados por los que pasa en el norte de Europa, que es la prioridad en estos momentos y sobre los que ha girado el 95% por de la cumbre de OTAN en Madrid. 

Pedro Sánchez puede lavar la imagen, al conseguir que se incluya en texto definitivo de las conclusiones lo de "preservar la soberanía y la integridad territorial de todos los aliados ante cualquier agresor". Que se puede considerar un logro de ejecutivo español, si bien nadie desconoce la ambigüedad de la citada declaración.

Esta cumbre de OTAN en Madrid, no solo para aumentar el gasto de defensa, o una leve declaración de sobre  la defensa de la soberanía territorial de los estados, también ha servido para hacer un lavado de cara al Gobierno y también a la propia monarquía. El tiempo, como siempre, dará y quitará razones.

Es la contradicción cuando más militares, cuanto más gasto militar; sin embargo, pasamos a vivir en un mundo más inseguro, y donde las prioridades militares tapan las preocupaciones y necesidades sociales.